Los andenes de una estación, el tren en movimiento… Con esta evocadora escena, Louis Vuitton nos transporta a un capítulo fundamental de su historia en la presentación de su colección Otoño-Invierno 2025-2026. En este escenario, donde convergen emociones y expectativas, la Maison captura la esencia del viaje en su más amplia expresión: la impaciencia ante la espera, la esperanza del amor o la melancolía de la despedida, la euforia del descubrimiento y el gozo del regreso.
Esta temporada, la colección se desarrolla en un espacio cargado de historias y sentimientos anónimos: L’Étoile du Nord, una estación secreta que resucita la fascinación por los viajes ferroviarios del siglo XIX. Este enclave simbólico es el telón de fondo de una propuesta que explora la moda como narrativa, fusionando el espíritu de la aventura con el encanto de lo desconocido.
Louis Vuitton rinde homenaje a su legado en el mundo de los viajes retomando un capítulo clave en su historia: su icónico equipaje. Esta temporada, la Maison reinterpreta la línea de bolsos flexibles que han acompañado la evolución del transporte, destacando especialmente el atemporal Keepall, cuya silueta clásica da la bienvenida a L’Express, un nuevo diseño definido por tonos suaves y líneas refinadas.
La innovación también llega a través de la música. En esta ocasión, Louis Vuitton colabora con el legendario grupo electrónico Kraftwerk, cuya influencia sigue resonando en la escena musical contemporánea. La portada del icónico álbum Trans-Europe Express se plasma en algunas de las prendas, impregnando la colección con el espíritu vanguardista y experimental que caracteriza a la banda.
De este modo, la colección Otoño-Invierno 2025-2026 de Louis Vuitton no solo celebra la historia del viaje, sino también la conexión entre la moda, la música y la emoción de lo desconocido. Un recorrido estilístico donde cada prenda es un billete hacia un destino lleno de magia y sofisticación.
Imágenes cortesía de Louis Vuitton
